RESEÑA DEL BLURAY "GOTHIC" DE RESEARCH ENTERTAINMENT
Pocos directores han tenido una visión cinematográfica tan desbordante, excesiva y radical como Ken Russell y la película Gothic (1986) de la que os queremos hablar hoy, es una de las expresiones más puras de su imaginario visual y temático. Aunque puede llevar a engaño su portada , que sugiere una típica película de terror gótico con criaturas, sombras y castillos lúgubres al estilo Hammer, en realidad Gothic es una experiencia sensorial, psicológica y febril , muy alejada del terror convencional. No es un relato de horror al uso: es un descenso a la locura, a la represión, a los deseos más oscuros de la mente humana, y una meditación sobre el poder creativo como fuerza destructiva.
Ambientada en Villa Diodati , la famosa mansión suiza donde en 1816 coincidieron algunas de las figuras más emblemáticas del romanticismo , Lord Byron, Percy Bysshe Shelley, Mary Shelley, Claire Clairmont y el médico John Polidori , la película revive la famosa noche de tormenta en la que los presentes se desafiaron a contar historias de terror. De aquella reunión nacerían dos pilares del horror moderno: Frankenstein (Mary Shelley) y El Vampiro (Polidori). Pero Russell no se limita a narrar ese hecho como una simple anécdota literaria: lo convierte en un aquelarre de represión, erotismo, drogas, pesadillas y demonios internos , fiel al espíritu del director y más interesado en el delirio que en la linealidad narrativa.
Desde el primer momento, Russell despliega un arsenal visual y sonoro hipnótico . La cámara se mueve de manera expresiva y agresiva, los colores saturados crean una atmósfera onírica e irreal, y los encuadres distorsionan constantemente la percepción del espectador. La estética del film recuerda a otras obras de Russell como Los demonios (1971) ,con su imaginería religiosa y su crítica al fanatismo, o La guarida del gusano blanco (1988), con sus visiones psicosexuales y el uso extremo del simbolismo fálico. También puede verse una continuidad con Viaje alucinante al fondo de la mente (1980), en la forma en que Russell retrata la transformación mental y física del ser humano bajo estados alterados.
En Gothic , los personajes ,todos ellos pertenecientes a la élite intelectual y aristocrática, son retratos distorsionados por sus propias obsesiones . Gabriel Byrne encarna a un Lord Byron carismático y cruel, siempre consciente de su magnetismo, mientras que Julian Sands como Percy Shelley se ve abrumado por sus ideas idealistas, al borde del colapso. Natasha Richardson interpreta a Mary Shelley como una joven atrapada entre el deseo y el trauma, y Timothy Spall da vida a Polidori como una figura patética, reprimida, que oscila entre la adoración y el odio. La tensión sexual, la culpa, la muerte, el temor a la creación y a la maternidad atraviesan toda la cinta.
A lo largo del metraje, lo sobrenatural no se presenta como una amenaza externa , sino como un reflejo de la psique de los personajes. Las alucinaciones, provocadas por el opio, el vino y la sugestión, se manifiestan en forma de pesadillas góticas y visiones de cuerpos deformes, cadáveres flotantes, símbolos religiosos profanados y fantasmas interiores. Cada escena es una provocación visual: hay una sensualidad perturbadora, una religiosidad blasfema y una teatralidad excesiva que convierte la experiencia en algo visceral y perturbador . En cierto modo, Russell convierte a estos intelectuales en víctimas de su propio talento, condenados a convivir con las monstruosidades que su imaginación convoca.
La música de Thomas Dolby acompaña perfectamente esta estética, con sintetizadores oscuros que dan un aire contemporáneo al relato histórico, reforzando el sentimiento de anacronismo intencional que caracteriza a muchas películas de Russell. Porque Gothic no busca realismo histórico , sino una representación estilizada del inconsciente romántico , una alegoría sobre la creación artística como maldición y bendición.
La película no es fácil de digerir . Su ritmo onírico, la constante sucesión de imágenes perturbadoras, y la ambigüedad narrativa pueden alienar al espectador que espere una historia de fantasmas tradicional. Pero precisamente ahí radica su fuerza: Gothic es una película de culto, una obra intensa, barroca y profundamente simbólica, que no busca contar, sino inquietar . Como en Los Demonios, Russell utiliza el exceso para revelar verdades psicológicas y emocionales, y como en Tommy (1975), crea un universo visual tan extremo que resulta alucinante.
En el film los personajes espurgan sus demonios: Byron, Shelley, Mary, Clairmont y Polidori se ven atrapados en un juego de espejos que refleja sus miedos, deseos y traumas , todo envuelto en una pesadilla inducida por sustancias y fantasía
Sin duda Gothic (1986) de Ken Russell representa una pesadilla barroca disfrazada de película de terror y puede considerarse una obra fundamental dentro del cine de culto. Sin duda Ken Russell es un provocador visual que convierte el exceso en forma artística, marcando una profunda influencia en cineastas como Terry Gilliam o Jean‑Pierre Jeunet.
La película se presenta como una combinación de ironía siniestra y delirio romántico llevado al límite. Que Ken Russell consiguiera, incluso en una etapa tardía de su carrera, seguir provocando una respuesta tan intensa del espectador, es prueba de su genio provocador. Aunque pueda parecer excesiva o incluso grandilocuente, Gothic conserva intacta esa energía visual y esa osadía estilística que definieron sus propuestas más audaces.
Sucede que Gothic no es una película de terror al uso, sino una experiencia alucinatoria, un viaje sensorial y febril a la noche de junio de 1816 en Villa Diodati, cuando Lord Byron y los Shelley , bajo la influencia del opio , engendraron los arquetipos de Frankenstein y el Vampiro. Lejos del horror institucionalizado, Russell nos lleva directo a la psique desbordada de sus personajes.
Aunque en ese momento Russell ya atravesaba un declive creativo, Gothic conserva un punto de frescura sorprendente. Empieza con una calavera flotando al ritmo de Thomas Dolby, anunciando que lo que sigue no es una narración convencional, sino un “descenso a la locura” cinematográfico .
En definitiva , Gothic es una película que desborda su propia etiqueta de “terror”. Es una exploración radical del arte, la locura y el erotismo, a través del filtro inconfundible de uno de los cineastas más provocadores del siglo XX. Ken Russell convierte una anécdota literaria en una pesadilla romántica , donde las palabras se transforman en imágenes y las ideas en visiones. No es para todos, pero para quien se deje arrastrar por su propuesta, el viaje es inolvidable.
Gothic [Blu-Ray] (1986)
Gabriel Byrne (Actor), Julian Sands (Actor), Ken Russell (Director)
La historia de la terrorífica velada entre Lord Byron, Percy Shelley, Mary Wollstonecraft y el Dr. Polidori, que, aislados a orillas del lago Ginebra, se propusieron sufrir el miedo en carne propia. Ese fin de semana nacieron las inspiraciones para las novelas "Frankenstein" y "The Vampire".
Detalles del producto
Relación de aspecto : 1.85:1
Clasificado : No recomendada para menores de 18 años
Dimensiones del paquete : 12 x 10 x 2 cm; 120 g
Director : Ken Russell
Formato multimedia : Blu-ray
Tiempo de ejecución : 87 minutos
Fecha de lanzamiento : 29 mayo 2025
Actores : Gabriel Byrne, Julian Sands, Natasha Richardson, Myriam Cyr, Alec Mango
Estudio : Research
ASIN : B0F6CW7PK6
País de origen : España
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